El bloque 37 de la calle de Tejedores en San Blas, se ha convertido en una pesadilla para los vecinos de la zona. El foco viene por parte de una familia realojada que están sometiendo sus vecinos a constantes ruidos y amenazas. Según alguno vecinos, les habrían llegado a perseguir con un machete.
Una de las familias afectadas, acabó dejando su piso ante la situación desesperante. Ahora, el piso de esta familia ha sido ocupado por el hijo de la familia conflictiva. La situación se lleva prolongando 24 años, desde que fueron realojados.
Los vecinos denuncian que no se han querido adaptar ni vivir en comunidad, han dicho basta a la música a altas horas de la madrugada y las constantes fiestas que tienen lugar en la vivienda.