Un paréntesis casi invernal debido a la borrasca Pierrick se impondrá al principio de esta semana en el norte peninsular, con lluvia, nieve en algunas montañas, rachas de viento y olas altas, pero el tiempo anticiclónico se impondrá a partir del miércoles con muchas horas de sol y temperaturas en ascenso.
En Madrid, concretamente, Pierrick se puede hacer notar al mediodía de este lunes, cuando se espera incluso que caigan algunas lluvias en la región. Y tras esas gotas, sol y cielos despejados que se mantendrán durante toda la semana.
De hecho, Madrid volverá a tener calor primaveral, con temperaturas que podrían acercarse a los 30 grados en el próximo fin de semana
Pierrick fue nombrada este lunes por Météo-France y es la 16ª de la temporada 2023-24 designada por el grupo de servicios meteorológicos del suroeste de Europa (Bélgica, España, Francia, Luxemburgo y Portugal).
“Con esta 16ª borrasca de la temporada, se iguala el número de nombramientos de la temporada pasada, la 2022 2023, que fue la más abundante. Ahora empatamos desde que en 2017 se puso en marcha el sistema de nombramiento de borrascas”, según Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Del Campo subrayó que “esta semana comienza con la influencia de la borrasca Pierrick, que dejará lluvia, nieve, viento intenso y mal estado de la mar sobre todo en el norte peninsular”. “A partir del miércoles se impondrá el anticiclón y tendremos tiempo estable durante el resto de la semana. Las lluvias quedarán acotadas al extremo norte de la península, aunque también irán remitiendo por allí”, añadió.
Según Del Campo, las temperaturas bajarán el lunes y el martes, y se recuperarán desde el miércoles, día en el que iniciarán un ascenso progresivo. “Serán altas para la época durante la segunda mitad de esta semana, cuando se superarán los 25 grados en amplias zonas e incluso se podrán rozar los 30 grados en algunos puntos”, adelantó.