La 'Operación Río Lobos', con tiroteo incluido en un peligroso registro en Móstoles
Al entrar la Guardia Civil en su domicilio de la calle de la Rejilla abrió fuego contra las agentes, rozando una de las balas a uno de ellos.
En la 'Operación Río Lobos' han sido detenidas 6 personas.
Foto: GUARDIA CIVIL |Vídeo: Telemadrid
REDACCIÓN
La Guardia Civil ha detenido a 6 personas, una de ellas en Móstoles, en la denominada 'Operación Río Lobos' por formar parte de un peligroso grupo criminal que no dudaba en secuestrar y torturar a sus víctimas para que les proporcionaran las contraseñas de las cajas fuertes donde guardaban joyas y otros objetos valiosos.
Dentro de las investigaciones llevadas a cabo, la Guardia Civil procedió al registro del domicilio de uno de los detenidos, en la calle de la Rejilla de Móstoles. Al intentar entrar en su vivienda, este miembro de la banda criminal abrió fuego contra los agentes, rozando uno de los disparos en el cuello de uno de ellos.
Se disfrazaban de policías y guardias civiles
La investigación la inició la Sección de Delincuencia Organizada Contra el Patrimonio de la Unidad Central Operativa (UCO) y la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Segovia, a raíz de la denuncia presentada por un matrimonio que fue parada, en la provincia de Segovia, por un grupo de personas vestidas como miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y que iban armados.
Según la denuncia fueron introducidos por separado en dos vehículos y trasladados por diversos tipos de carretera por espacio de casi dos horas, hasta que les llevaron a un contenedor de mercancías, en una finca de la provincia de Toledo, donde fueron secuestradas y torturadas para que les dijeran donde tenían las joyas así como las claves de seguridad para poder acceder a ellas.
Planificaban un gran robo contra una empresa tecnológica
El grupo preparaba, en un breve espacio de tiempo, un asalto a una empresa tecnológica con el objetivo de conseguir un botín valorado en más 14 millones de euros, según sus previsiones y que pretendían introducir en dos camiones. Para ello, tal y como detectó la Guardia Civil habían realizado un seguimiento previo al guardia de seguridad de la empresa, al que pretendían secuestrar.
La actuación fue abortada por los propios autores por un fallo mecánico en uno de los camiones que pretendían utilizar para el robo en la empresa y por las restricciones de movilidad derivadas de la alerta sanitaria del Covid-19. La Guarda Civil tenía preparado un amplio dispositivo para que el secuestro del vigilante de seguridad y el robo de la empresa no se llegara a materializar.
6 detenidos y 6 registros
De los seis detenidos, cuatro de ellos se encargaban del secuestro, traslado y torturas de las víctimas, mientras que los otros dos recopilaban información de sus objetivos, por lo que se les considera cooperadores necesarios y, por lo tanto, coautores de los delitos investigados.
En los 6 registros domiciliarios, los agentes se han intervenido de dos armas cortas de fuego y una escopeta con los cañones recortados, así como abundante munición, varias armas simuladas, pistolas táser, armas blancas, grilletes, gran cantidad de prendas de uniformidad policial como uniformes, gorras, chalecos identificativos, chalecos antibalas, placas policiales identificativas, rotativos de vehículos policiales, así como matrículas falsificadas, dinero en efectivo y joyas.
La operación, ha estado coordinado por el Juzgado de Instrucción número 1 de Sepúlveda (Segovia), cuyo titular ha decretado prisión incondicional para todos los detenidos.