Cuando regresaron de sus vacaciones el domingo se encontraron con la desagradable sorpresa de que les habían forzado la puerta y les habían robado los objetos de valor, en Príncipe de Vergara.
El susto fue tremendo. Se encontraron toda la casa revuelta, buscaban joyas y dinero en armarios, cajones, muebles.
Se llevaron todas la joyas y 600 euros en metálico. Después observaron que los ladrones habían marcado la puerta de la casa con unas rayas a lápiz. Quieren alertar a otros madrileños de este tipo de robo.
“Me llamaron la atención porque dejaron la puerta marcada. Las encontramos en un margen y son como puntos para señalar la casa con lápiz”.
Ahora Patricia y su familia tienen miedo a que pueda volver a repetirse y les pueda pillar en casa. Siente impotencia porque han violado lo más sagrado, su casa.
“Cuando entras en algo que crees que está seguro y la sorpresa que nos llevamos fue mayúscula. Al entrar estaban todos los armarios abiertos y todos los cajones tirados por el suelo y por la cama” nos cuenta.
“Es un disgusto tremendo, fue como una sensación de impotencia y de decir pero qué pasa” nos confiesa. “Horrible, nos han quitado las alianzas, el anillo de compromiso”.
Los vecinos no escucharon nada. “Nadie se enteró de nada. Mi vecina salió ese fin de semana. El viernes hubo una mudanza y en la segunda había una obra”.