Buenos Días Madrid ha tenido acceso a la segunda declaración de Ana Julia Quezada ante el juez. La asesina confesa del pequeño Gabriel se negó a responder a las preguntas comprometidas.
Su estrategia es no decir nada. Ana Julia ya no se derrota ni llora como en la anterior declaración ante el juez. Es capaz de mantener la compostura con absoluta frialdad a pesar de la dureza de las preguntas.
Y es que el juez sospecha que quiso hacer vudú o algún tipo de ritual con el cuerpo del menor. A la pregunta de por qué quiso cortarle la mano con un hacha, Ana Julia contestar con un simple "no voy a contestar a esa pregunta".