Cien mil turistas se dejaron 20 millones de euros en hoteles, bares y restaurantes el pasado Puente de la Inmaculada.
El cierre de Madrid beneficia a la restauración pero castiga de forma especial al sector hotelero. Los turistas no llegan a la ciudad y hay hoteles de lujo que han optado por el cierre.
Un ejemplo lo encontramos en la cadena VP Hoteles. Dos de los cinco alojamientos de la cadena en Madrid están cerrados desde el pasado mes de marzo, el Plaza España y el Jardín Metropolitano. Las pérdidas son cuantiosas y las estiman en medio millón de euros al mes.
Calculan que la reapertura llegará en Semana Santa si son optimistas y en septiembre del próximo año, en el peor de los casos.
Escenario pesimista, 2022
Javier Pérez, director general de VP Hoteles, lamenta las pérdidas de grandes hoteles como el de Plaza de España.
“El restaurante está abierto pero no recibimos clientes. La semana del Puente era espectacular con un 99 % de ocupación en nuestras más de 200 habitaciones. Estamos muy tristes y si no se prolongan los Ertes en enero tendremos que hacer hasta Eres. Pensamos que no abrermos hasta 2022 en el escenario más pesimista. Nuestra ocupación en su mayoría es internacional” asegura Pérez.
En el escenario más optimista, confían en sobrevivir hasta Semana Santa.
