El incendio de varias chabolas en el vertedero de Fuencarral que, por fortuna, no causó víctimas mortales ni heridos, sí ha causado grandes daños materiales, especialmente a las dos familias que vivían en las chabolas y que se han quedado en la ruina.
El material con el que están realizadas estas infraviviendas, sobre todo maderas y contrachapados, contribuyó a la rápida propagación del fuego. La acumulación de enseres, maderas y contrachapados generó una columna de humo visible desde varios puntos de la ciudad.
No han recuperado nada
Las familias afectadas piden maderas para reconstruir las chabolas, ropa para sus hijos o todo lo que se pueda dar para ayudarles en estos momentos, porque no han podido recuperar nada de sus objetos personales, según han comentado a Telemadrid.
Se investiga cuál fue el origen del incendio que comenzó en una de las chabolas, en la que no había nadie en ese momento, y luego se extendió a otras.