A partir del próximo año comienzan las restricciones a la movilidad para los vehículos diésel anteriores a 2006 y los de gasolina previos a 2002 de fuera de Madrid que no podrán circular por el interior de la almendra central. Además, en el 2023 la prohibición se extiende y este tipo de vehículos tampoco podrán circular por la M-30.
Es lo que contempla la nueva ordenanza del Ayuntamiento de Madrid y que discute la Plataforma de Vehículos Afectados por la Movilidad que pide cambios en esta normativa y va a presentar alegaciones a la misma.
Miguel Álvarez, de la Plataforma de Vehículos Afectados por la Movilidad, dice a Buenos Días Madrid que “hemos presentado un total de 6.000 alegaciones a la ordenanza de movilidad sostenible porque el criterio que usa el Ayuntamiento es el del etiquetado de las pegatinas de la DGT que sólo tiene en cuenta la motorización del vehículo y la matriculación y no tiene en cuenta las emisiones reales como dice la normativa de la Unión Europea”.
Se conculcan derechos fundamentales
“Nosotros queremos que se tengan en cuenta las emisiones reales y que se valoren las mejoras al vehículo como por ejemplo poner catalizadores de última generación, convertirlo a gas natural comprimido etc”, subraya Álvarez.
Destaca Álvarez que “la mejora medioambiental es comprensible pero no puede hacerse a costa del desarrollo económico y social y de la calidad de vida, nosotros consideramos que se están condenando derechos y libertades fundamentales, como la libertad de circulación y una serie de derechos recogidos en la Constitución y en la normativa europea que sólo pueden ser modificados por una Ley Orgánica no por una ordenanza municipal”.
Álvarez explica a Buenos Días Madrid que en esta nueva normativa municipal Madrid Central se mantiene con el mismo perímetro, se crea la zona de Plaza Elíptica y todo Madrid se va a convertir en una zona de bajas emisiones para determinados vehículos y “a partir de 2030 no pueden circular dentro de la M-30 los vehículos sin etiqueta medioambiental pero sólo de no residentes. En 2023 no pueden entrar dentro de la M-30 ni circular en la M-30, en 2024 ningún vehículo sin etiqueta de no residente podrá entrar dentro del término municipal de Madrid. Y en 2025 ningún vehículo en el término municipal de Madrid”.
Álvarez señala que “afecta a 315.000 turismos en Madrid y en toda la provincia a 770.000 turismos y 80.080 motos, sin contar furgonetas o camiones”.