En las últimas horas hemos sabido que el taxista que atropelló mortalmente a una mujer y a otras ocho personas en una terraza de la calle Bravo Murillo a finales de agosto había consumido medicamentos y cocaína.
Lo dice el informe policial, que asegura además que el vehículo iba a gran velocidad. El conductor ha declarado en el Juzgado que no recuerda nada de lo ocurrido.
Elena Sanz, abogada de las víctimas que arrolló el taxista, dice a Telemadrid que “él puede manifestar lo que quiera, pero debe conocer a priori los peligros de ingerir medicación o drogas, por su profesión, no es una persona cualquiera”.
La amnesia del taxista
Sobre los delitos a los que pueda enfrentarse señala Sanz que “evidentemente, el informe policial puede apuntar a conducción temeraria o conducción bajo el efecto alcohol o drogas y eso sería un delito, aunque estamos al principio de la investigación y habrá que esperar. Si el taxista no lo recuerda habrá que averiguar lo que ocurrió por otros métodos”.
“Hay que tener en cuenta también que una persona falleció, pero hay 6 o 7 víctimas con secuelas importantes y con situaciones psicológicas importantes, como por ejemplo una persona que da largos rodeos, porque no ha sido capaz de volver a pasar por la zona”.
El suceso ocurrió el pasado 28 de agosto sobre las 23:30 de la noche cuando un taxista con su vehículo a toda velocidad arrolló a los clientes que estaban sentados en una terraza de la calle Bravo Murillo. Murió una mujer y 8 personas resultaron heridas, dos de ellas graves. Ahora se juzga al taxista y además de la representación de los arrollados y heridos, el dueño del bar se personado en el juicio como víctima.
El taxista ha declarado ante el juez y ha señalado que no se acordaba de lo ocurrido. También ha negado haber consumido drogas. Su defensa presentará un informe que demuestra que el taxista sufre un trastorno cognitivo grave.