Nada ha cambiado en la calle San Dalmacio en Villaverde. Apenas unos meses después del desalojo de 15 narcopisos en una operación policial que tuvo lugar en el mes de mayo, los vecinos denuncian que los camellos se han instalado en un campamento de unas 15 chabolas y tiendas de campaña en un descampado a 200 metros de la viviendas.
Los vecinos vuelven a tener miedo y están desesperados. Ven como la gran operación policial no ha servido para nada. Los toxicómanos vuelven a invadir y por las noches las peleas son continúas. Aseguran que apenas pueden salir a la calle.
A todo ellos se une la insalubridad que inunda las calles del barrio, con las aceras llenas de plásticos, latas tiradas por el suelo, cristales rotos e incluso electrodomésticos abandonados en las aceras.
No es el único problemas. Las viviendas de los edificios desalojados, y cuyas ventanas fueron tapiadas, han vuelto a ser ocupadas. Esta vez, dicen, por familias que viven en su interior incluso con niños.