Están muy cansados, indignados y decepcionados. Así se encuentran los vecinos del número 87 de la calle San Bernardo.
En Buenos Días Madrid denuncian que tienen que sufrir cada semana como sus vecinos alquilan pisos turísticos que acaban convirtiéndose en pisos para celebrar fiestas ilegales "estamos hasta la coronilla".
Aseguran que las fiestas en doce pisos son continuas desde el mes de junio. Y no sólo en el fin de semana. Los ruidos, golpes, la música hasta altas horas de la madrigada también se convierte en una pesadilla entre semana.
Más que los problemas del ruido las molestias que pueda generar la música, hablan de un problema de salud en plena pandemia. “Esto es un atentado contra la salud pública”.
Lamentan que la presencia de la Policía Municipal no sea suficiente para acabar con este tipo de prácticas.