Tras la dimisión de Luis Rubiales, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) está obligada a abrir un proceso electoral. Hay tres opciones.
La primera opción son elecciones de inmediato, pero el elegido sólo estaría un año en la presidencia de la Federación porque la Ley obliga a convocar elecciones tras los Juegos Olímpicos.
La segunda opción sería alargar el mandato de la actual Junta Directiva como gestora hasta el mes de octubre de 2024.
Aún quedaría una tercera vía, la opción preferida por el Gobierno, elecciones en el mes de enero, que tendría que tener el sello de beneplácito del Consejo Superior de Deportes (CSD).
De momento, la RFEF está en manos de los directivos de confianza de Luis Rubiales, con Pedro Rocha a la cabeza. El papel de los presidentes de las federaciones territoriales toman un papel muy importante.
Entre los aspirantes a sustituir a Rubiales está, Rafael del Amo, presidente de la federación de Navarra, Salvador Gomar, presidente de la federación valenciana, y el continuismo representado por el presidente de la catalana, Joan Soteras.