Como si tuviera rayos x en los ojos. El segundo gol de la Selección española ante Rumanía (1-2) define a Dani Ceballos como un jugador, al menos, diferente.
Ceballos se inventó el segundo gol de España y el penalti con el que Sergio Ramos abrió el marcador en el partido clasificatorio para la Eurocopa 2020.
Se luce en Londres
Su actuación ante el combinado rumano es la prolongación del buen inicio liguero en el Arsenal. En su exilio inglés ya se ha convertido en un ídolo del equipo de Emery.
Ceballos se ha llevado su magia a Inglaterra tras levantar una Eurocopa Sub'21 en la que mostró todas su cualidades. El sevillano hace muchas cosas y casi todas bien. Pero esto no es suficiente para Zidane.
Zidane no confía en su fútbol
Ceballos tuvo que emigrar. Su relación con Zinedine Zidane nunca terminó de cuajar y más después de unas declaraciones del futbolista tras la salida del entrenador francés hace un año.
Zizou tomó nota. Y a su vuelta en la pasada temporada tampoco contó con Ceballos. Incluso llegó a humillarle ante el Leganés cuando le sustituyó a los 30 segundos de saltar al campo. Tiene que aprender, como dijo Zidane, y aprende a marchas forzadas. Pero lejos del estadio Santiago Bernabéu.