La Liga de las Naciones se pone cuesta arriba para la Selección española tras la derrota contra Suiza por 1-2 con un juego irreconocible. El método Luis Enrique está en la cuerda floja.
Si echamos la vista atrás, vemos un equipo alejado de su estilo, con falta de presión y poca agresividad en ataque. Ante Suiza se perdieron 145 balones. Se lograron 52 ataques, pero solo cuatro disparos entre los tres palos.