Ja Morant cometió numerosos errores. Cayó hasta el mismísimo infierno, pero ha vuelto por todo lo alto. El base de los Grizzlies dejó una auténtica exhibición en su regreso a las canchas 25 partidos después.
Lo hizo anotando 34 puntos, repartiendo 8 asistencias y cogiendo seis rebotes. Pero su momento estelar llegó a falta de cuatro segundos, cuando con empate en el marcador, hizo un jugadón.
Un auténtico recital para recordarle al público que ha vuelto para quedarse. Y es que la carrera de Morant parecía tocar fondo con las dos sanciones que le impuso la NBA.
La primera vez en marzo de este año, por exhibir una pistola en un club de Detroit y subirlo posteriormente a redes sociales. A penas dos meses después, mismo delito, mostrar una pistola en redes, pero esta vez, mientras conducía un vehículo.
En total 33 partidos de sanción y una penalización de cerca de 10 millones de euros para un jugador llamado a marcar una época.