El centrocampista croata Luka Modric mejoró sus sensaciones en el entrenamiento del Real Madrid en la ciudad deportiva de Valdebebas, donde por primer día desde que tuvo un percance muscular pudo acabar una sesión de la que se ausentó el francés Ferland Mendy, única baja confirmada para la final de la Copa del Rey ante el Osasuna.
La prueba de Modric en la parte menos dura del entrenamiento vespertino del miércoles, tuvo continuidad en la mañana del jueves con una mejoría de sensaciones por parte del croata, según informaron a EFE fuentes del club.
Las posibilidades de que Modric, lesionado en los isquiotibiales de la pierna izquierda desde el 28 de abril, pueda integrar la expedición que el viernes viajará a Sevilla aumentan.
La decisión de jugar o reservarlo para el duelo de la Liga de Campeones tres días después ante el Manchester City, la tomará en las últimas horas previa a la final Carlo Ancelotti. Si cita a Modric, dispondrá para valorar su estado el último entrenamiento que el Real Madrid completará en el escenario del partido desde las 20.00 del viernes.
En su última sesión de trabajo en la capital de España, la plantilla madridista arrancó en el gimnasio con trabajo de potenciación y fuerza. Ancelotti juntó a todos sus jugadores disponibles, sumando al grupo a los que fueron titulares ante la Real Sociedad. Sobre el césped hubo momentos para preparar la estrategia de la final de la Copa del Rey, antes de la disputa de un intenso partido en un campo de reducidas dimensiones.
En él participaron jugadores que estaban tocados como Karim Benzema y Fede Valverde, David Alaba demostró que ha dejado atrás la rotura muscular que sufría, y los tres están en perfectas condiciones para ser titulares ante el Osasuna.
Así como Vinícius Junior que descansó por sanción en el último encuentro de LaLiga y ha superado las molestias que sufría por un golpe en la rodilla.