Zara Mújica vivía en Gales y soñaba con triunfar haciendo lo que más le gusta, jugar al fútbol. El CD Tacón, dice la guardameta, le promete una beca para que pudiese fichar por el equipo y mudarse a España, donde vive con sus abuelos.
Pasan los meses y la ficha no se tramita, debido a unos problemas de tutela que según Ramón, padre de Zara, eran inexistentes. Además, el CD Tacón, cuenta la familia, les exige una cantidad de 760 euros para temas sanitarios, sus padres acceden al pago.
Todo se tuerce cuando Zara se lesiona del hombro y, lamenta la futbolista, carece de seguro médico y desde la directiva del club la exigen que mienta sobre su lesión, expresando que esta se ha hecho en el instituto y no en el entrenamiento rutinal, nos cuenta Zara.
La familia decide que la mejor solución es que Zara vuelva a Gales, en donde comienzan con los procesos judiciales que a día de hoy se están tratando. Zara paso del sueño a la pesadilla.