El que ya ha sido llamado el escándalo sexual del verano, va camino de convertirse en un culebrón. Política, fútbol y televisión podrían estar mezclados. El nombre de un participante de un concurso televisivo ha saltado a la palestra. Mientras tanto, los protagonistas intentan seguir con su vida. La concejala sigue con su vida normal junto a su marido y disfruta de las fiestas del pueblo, el futbolista espera a que el entrenador le saque del banquillo tras un parón prudencial y todos están citados a declarar el próximo 27 de septiembre.