2019 ha sido un año de alegrías, pero también de dramas para nuestros famosos. Doce meses que han quedado para siempre marcados por importantes bodas, como la de Pilar Rubio y Sergio Ramos, y algún que otro nacimiento, como el de Archie Harrison, el hijo de Meghan Markle y el Príncipe Harry de Inglaterra. Pero en este tiempo, algunas de nuestras celebrities favoritas también han decidido poner punto y final a sus relaciones sentimentales y comenzar una nueva vida en solitario, como es el caso de Clara Lago o Mario Casas. Por eso, repasamos las cuatro rupturas que han marcado –para mal- este año que llega a su fin.
Clara Lago y Dani Rovira
En primer lugar, y como estaba claro, la ruptura que más nos impactó fue la de Clara Lago y Dani Rovira. Este pasado marzo llegaba la que se convertiría en la noticia más triste del año para el mundo del corazón: Clara Lago y Dani Rovira, ponían punto y final a su noviazgo tras cinco años de relación.
Posiblemente una de las rupturas que más nos ha costado superar de este 2019. Y, es que nadie podía esperárselo. Además de tener varios proyectos en común –y con los que han continuado a pesar de no entenderse como pareja-, todos creíamos que su relación era una de las más estables. Menos mal que siguen llevándose de maravilla y prosiguen con sus proyectos benéficos. ¡Pa’ la friendzone!
Alejandro Sanz y Raquel Perera
”Un amor puro y comprometido. Somos una familia y siempre lo seremos. Decidimos amarnos para siempre y así será. Lo eterno tiene la complejidad y la ventaja de transformar las maneras de amarse en otras direcciones, sin destruir el cariño, la lealtad y la responsabilidad conjunta sobre nuestros hijos. Nuestra familia está por encima de cualquier cosa...es diversa y bella, como la vida y así permanecerá. El mundo cambia, nosotros también, siempre amorosamente. Gracias por respetarlo”.
Este fue el enigmático mensaje que nos dejaron Raquel Perera y Alejandro Sanz en sus redes sociales el pasado mes de julio. Con estas líneas y una tierna foto en la que se podía ver al cantante y a la empresaria acompañados de sus dos hijos en común, Dylan y Alma, llegaba tras semanas de rumores, la confirmación de su separación. Una relación que se vio afectada por la llegada de una tercera persona, Rachel Valdés. Una joven escultura que logró conquistar el corazón del artista y con la que lleva una relación de lo más discreta.
Blanca Suárez y Mario Casas
Otra pareja que ha decidido poner punto y final a su relación este 2019 ha sido la formada por Blanca Suárez y Mario Casas. A finales de octubre, El Madroño informaba en primicia sobre este triste hecho y todo gracias a una fiel seguidora de nuestro programa que nos puso tras la pista.
Blanca había dejado de dar ‘like’ a las fotos de Instagram de Mario Casas. Y viceversa. A esto se le sumaba que llevaban algo más de un mes sin coincidir, como pudimos comprobar en sus perfiles de las redes sociales y que a la actriz se le relacionaba con un famoso cantante español, Pablo López.
Aunque esto último no se ha podido confirmar, lo que sí hemos descubierto con el paso del tiempo ha sido el motivo de su ruptura. Al parecer, las culpables habrían sido sus apretadas agendas. Un sinfín de compromisos laborales que habrían obligado tanto a Blanca como a Mario a relegar a una segunda posición su relación sentimental.
Ágatha Ruiz de la Prada y Luis Miguel Rodríguez
Un drama muy reciente. A finales del mes de noviembre, una conocida revista de la prensa del corazón sacó, en exclusiva, unas imágenes en las que se podía ver a Luis Miguel Rodríguez pasándoselo muy, pero que muy bien con Marcia Di Lele, una ex de Kiko Rivera. Según se afirmó en las páginas de esta publicación, el reciclador pasó pasado una velada de lo más romántica junto a esta actriz de cine para adultos y, al despedirse de ella, le dio un apasionado beso.
De esta dramática manera, Ágatha Ruiz de la Prada se enteraba de la infidelidad de su chico y decidía poner punto y final -o eso parecía- a su relación de más de dos años de duración con Luis Miguel Rodríguez. Sin embargo, la diseñadora se lo pensó dos veces y tras un reparador viaje a París, donde tuvo tiempo para reflexionar sobre el futuro de su relación, decidió darle una segunda oportunidad a su reciclador.