Sin duda alguna se trata del reencuentro más esperado de la temporada. Es la primera vez que el Príncipe Harry y el príncipe Guillermo se ven las caras desde que anunciaran públicamente que sus vidas habían tomado caminos por separado. También ha sido la primera vez desde que la Reina Isabel eliminara de su sala de recepciones el retrato de los Sussex y mantuviera el de los Cambridge.
Y parece que las imágenes han dado la razón a las malas lenguas. Y, es que, tal y como se puede observar en las instantáneas, la relación entre las parejas está más fría que nunca. Durante el evento que se ha celebrado este pasado sábado 9 de noviembre, en el Royal Albert Hall de Londres, no se ha visto ni un solo gesto de complicidad entre los Sussex y los Cambridge. El distanciamiento ha sido más que evidente. Tanto es así, que todos los tabloides británicos se han hecho eco de la ausencia de relación entre las dos familias.
Pero tenían una segunda oportunidad para enmendar sus errores y, quizá, desempeñar el papelón de sus vidas. Este domingo se ha celebrado, también en Londres, el día del Armisticio, una jornada con la que se conmemoraba el final de la Primera Guerra Mundial. Sin embargo, y muy lejos de las reacciones que todos esperábamos ver, los Duques y sus mujeres han estado más alejados que nunca. En esta ocasión, hasta un balcón se les puso de por medio.
Tanto Harry como Guillermo se han dedicado a desempeñar la función que les competía. Sin muestras de cariño. Ni signos de complicidad. Solo dos personas llevando coronas de flores. Punto y final.