El Real Madrid se fue de vacío de Moscú. Cayó ante el CSKA (1-0) con un gol encajado en el primer minuto de juego. El campeón de Europa sumó su tercer partido consecutivo sin ver puerta, pero es que además volvió a dejarse sorprender al comienzo del partido.
Como ocurriera en este mismo escenario, el estadio Luzhnikí, con España en los octavos de final del Mundial, el equipo madridista no pudo romper la muralla rusa, defendida por el mismo portero, Ígor Akinféev.
Benzema desespera
La segunda unidad decepcionó. Ceballos no se encontró cómodo en ningún momento del partido. Marco Asensio no asumió galones. Y la delantera echó mucho de menos a Bale. Fue un ejercicio de impotencia que llevó a muchos a acordarse de Cristiano Ronaldo y a pedir a gritos la entrada de Mariano por Benzemá.
El Real Madrid, que no perdía en tierras rusas desde los galácticos, no pudo romper el mal fario del Luzhnikí, donde el equipo blanco nunca ha podido ganar.
Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal (Odriozola, min.42), Varane, Nacho, Reguilón; Casemiro (Modric, min.58), Kroos, Ceballos; Lucas Vázquez (Mariano, min.58), Marco Asensio y Benzema
Goles: 1-0, min.1: Vlasic
Árbitro: Ovidiu Hategan (ROM). Amonestó a Bijol y expulsó a Akinféev de roja directa
Incidencias: partido correspondiente a la segunda jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones (Grupo G) disputado en el estadio Luzhnikí ante unos 70.000 espectadores (dos tercios del aforo)