El técnico madrileño Pablo López cogió al Atlético de Madrid femenino en octubre y se ha visto apartado del banquillo sin haber perdido un solo partido.
"Me quedo con la fortuna de haber podido dirigir a un equipo de una entidad tan grande y con la clasificación en la Champions frente al Manchester City. Nadie daba un duro por nosotros pero fue mágico", señaló.