Charlamos con uno de los capitanes del Rayo Vallecano, el argentino Oscar Trejo. Número 8 a la espalda, no solo se le distingue por sus botas azules, se le distingue de verdad por su talento y su clase.
Sobre la posibilidad de ganar al Barcelona por fin, no lo hacen desde 2002, asegura: "A día de hoy los números dicen que estamos cerca de ellos, si se les puede meter mano es este año, confiamos en hacer un buen partido, hacer lo que estamos haciendo habitualmente en casa. Tenemos que creernos que les podemos ganar”.
No se le ha olvidado a Trejo el último enfrentamiento liguero en Vallecas. Fue en noviembre de 2018 y el Rayo ganaba 2-1 en el minuto 86. Luego llegaron los goles de Dembelé y Luis Suárez y la dura derrota final.: "La gente gritaba, cantaba, pero en 3-4 minutos nos marcaron dos goles, no nos lo podíamos creer. Hicimos un partidazo ese día, pero…”.
Trejo tiene galones en el vestuario y sobre el césped. Y tiene muy claro porque el Rayo compite así de bien en cada partido “porque nos hemos sacado el miedo de ir a por los partidos, porque tenemos un plantel completo, nos estamos ganando un debido respeto, ojalá que sigamos por el mismo camino”.
Sobre Falcao vierte una catarata de elogios: “es nuestro líder, tratamos de hacerle las cosas más fáciles, nos va a dar muchas alegrías. Solo con saludarlo y mirarlo ya sabes que es uno de esos hombres tocados por la varita, nos enseña todos los días, le estamos disfrutando. Además, admiro su calidad humana, eso le hace extremadamente diferente, hay que aprender mucho de eso”.
Sueña con un Rayo en Europa llevando el brazalete de capitán, pero hombre de realidades prefiere asegurar antes la salvación. Reconoce que ha encontrado su casa en Vallecas, el trabajo, la gente, el barrio, le recuerdan a su lugar de nacimiento, por eso dice sentirse identificado con el club y sus gentes.
Trejo no elude hablar sobre los problemas de organización del club, problemas que han abierto un cisma con parte de los aficionados: “Sé que tienen que cambiar muchísimas cosas aquí, nosotros seguimos en la lucha, pero no tenemos el poder de decisión, solo puedes quedarte con la mente tranquila en el sentido de que intentas que la situación mejore. Pero lo prioritario para nosotros es lo que pasa en la cancha, el poder de decisión lo tiene el jefe, el presidente”.
Y para acabar una de futuro. Acaba contrato en 2023. ¿Quiere renovar?: “Sobre la renovación no me han dicho nada, pero si se da me sentaré a hablar, me gustaría seguir aquí”.