Según un estudio de la Comunidad de Madrid las principales compañías de telefonía móvil que operan en España cometen irregularidades en los procesos de contratación de sus productos así como en la información que ofrecen a los consumidores antes de las contrataciones.
Esta campaña la ha realizado de oficio la Dirección General de Consumo durante los últimos meses del año pasado y se ha orientado principalmente al control de incumplimientos que acaban convirtiendose en prácticas habituales o cláusulas abusivas que afectan, por ejemplo, a los procesos de portabilidad o al uso de tarjetas prepago.
Durante la campaña se descubrieron hasta 189 irregularidades sobre un total de 527 puntos evaluados en las empresas de telefonía inspecionadas, lo que supone casi un 36% de no conformidades en la normativa vigente en materia de consumo. El estudio revela que otro de los calvarios frecuentes para los consumidores suele llegar cuando solicitan liberar su móvil.
La inspección se llevó a cabo mediante cuestionarios y buceando en las páginas web de las doce empresas proveedoras, pero también visitando tiendas a pie de calle para evaluar in situ la contratación presencial y la distribución de productos especialmente en el caso de operadores virtuales.