El suicidio infantil es muy poco común en España. Según las cifras del instituto nacional de Estadística, las últimas oficiales, en 2013 se quitaron la vida nueve niños de entre 10 y 14 años. Lo cierto es que uno de cada cuatro alumnos sufren el llamado bullying. El último caso de acoso confirmado en Madrid fue el de una niña de 16 años alumna de un Instituto de Usera.
Es importante detectar los síntomas tanto en la familia como en los centros educativos. Un problema que tiene solución si se detecta a tiempo y se pone en manos de profesionales. En la Fundación ANAR, de ayuda a niños y adolescentes en riesgo, hay un teléfono que asegura la confidencialidad del menor que atraviesa una situación difícil.
Expertos en psicología atienden las llamadas en el 900 20 20 10 y ofrecen asesoramiento y ayuda para resolver el problema. Benjamín Ballesteros, director de Programas de la Fundación ANAR. En lo que llevamos de año, este teléfono ha recibido 621 llamadas, 15 de ellas de menores de 10 años con tendencias suicidias. Acabar con su vida es la única solución que ven al problema que les atormenta. En las redes sociales, en muchos casos, encuentran cómo