El número de nacimientos, que es superior al de defunciones, muestra un lento descenso desde 2009, en consonancia con la crisis económica.
El saldo migratorio es negativo, al reducirse la población en 53.770 habitantes.
Continúa el incremento de la edad media, la cual, a 1 de enero de 2014 es de 43,5 años. Por sexos, el promedio de edad de los hombres, que es de 41,4, es inferior en casi cuatro años al de las mujeres.
Ello es debido a la mayor mortalidad de los hombres en todas las edades. La proporción de la población de 65 y más años, ya alcanza el 20,2 para el conjunto de la ciudad.
El alargamiento de la vida se traduce en la presencia de una "cuarta edad". Las personas de 80 y más años, suponen el 6,9 por ciento de la población, con predominio de las mujeres. Los nacidos en Ecuador son el grupo más numeroso de los que viven entre nosotros.