El 29 de enero de 1981, cinco años después de asumir la jefatura del Estado, Suárez se marcha con todos los estamentos en su contra. La iglesia por la ley del divorcio, la banca por las medidas eco del gobierno, los militares por su pérdida de poder y además un distanciamiento con el rey que ya parece insalvable: Adolfo Suárez dimite. Y se convierte en el único presidente de la democracia que ha dimitido en nuestro país.
Según algunas informaciones existía un dossier que podría manchar la imagen del expresidente. “A Suarez le estaban haciendo la vida imposible, ya no solo la oposición, si no su propio partido” señala Rosa Villacastín en ‘Huellas de Elefante’, “Suárez fue a visitar al rey, que en ese momento se encontraba reunido con los altos cargos militares. Al minuto, Suárez sale a realizar una llamada, le sigue un alto militar que le saca una pistola y le obliga a dimitir” continúa explicando la periodista, “Suárez se niega, dice que ha sido elegido popularmente y que no piensa dimitir” concluye.
Antes de dimitir Suárez lo consulta con su mujer, quién le apoya en todo momento y es la encarga de escribirle el discurso de dimisión. Joaquín Leguina explica que en ese momento muchos se quedaron muy sorprendidos. En ese momento nadie sabía lo que estaba pasando. “Los militares de ahora, no se parecen en nada a los militantes de antes” señala.
Los colaboradores piensan que no existió ese dossier del que se habló en su momento y que Suárez dimitió porque no contaba con los militares ni con el apoyo del Rey.