El Ayuntamiento de Madrid pagará a la Policía Municipal 8,7 millones de euros por las horas extraordinarias realizadas durante el año 2016 debido al incremento de la actividad en las calles, a la falta de agentes al no convocarse nuevas plazas y al envejecimiento de la plantilla.
El delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, ha dado estos datos en la comisión municipal del ramo cuando la edil del PP Carmen Castell le ha preguntado por la cuantía que el Ayuntamiento abonará en calidad de horas extras por la "mala planificación" del concejal, a su juicio.
Javier Barbero ha dicho que pese a que del 1 de enero al 31 de diciembre se gastaron 8,7 millones en horas extra, con cargo a los presupuestos de este año se incluirá también el pago de las horas realizadas en el último trimestre de 2015 -incluidas las de las elecciones generales-, con lo que la partida asciende a 10,2 millones de euros.
La edil del PP se ha mostrado convencida de que esa cifra final rondará los 12 millones de euros, lo que a su juicio sería "escandaloso" y una evidencia de "una mala gestión de los medios y recursos "Cerrar el Paseo del Prado y la Gran Vía tiene una megafactura en horas extraordinarias de la Policía que pagan con el dinero de todos los madrileños", ha denunciado la edil popular, que ha añadido que en el distrito de Tetuán "ha habido muertes violentas" los mismos días que el concejal "se gastaba el dinero en el cierre de la Gran Vía".
Además de tachar de "escandaloso" que el PP asocie "los sucesos de Tetuán" con el cierre de la Gran Vía y de preguntarle a la edil si ha trasladado esa "misma reflexión a la Delegación del Gobierno", el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias ha recordado que el gobierno del PP gastó 11,3 millones de euros en 2011 cuando Madrid tenía "el máximo número de policías".
Ahora, según ha dicho el delegado, la plantilla tiene "un claro déficit" después de cinco años sin convocarse nuevas plazas y con la plantilla más envejecida, lo que implica que no quede "más remedio" que pagar horas extraordinarias para, entre otras cosas, aumentar la actividad en el espacio público y trabajar en la "línea preventiva" que exige estar en alerta 4 por terrorismo.