El equipo de Gobierno de Manuela Carmena destinará en total 5 millones de euros al proyecto de remodelación de la Gran Vía, que tendrá dos carriles por sentido, de los que uno se reservará a la circulación del transporte público y otro al paso de residentes y de carga y descarga.
El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, ha desglosado hoy en la comisión del ramo los planes del equipo de Gobierno para esta arteria, sin citar en ningún momento ni vincular su plan a la consulta ciudadana en la que los madrileños deben decidir si quieren ampliar las aceras, poner más pasos de cebra, qué hacer con las plazas aledañas a la arteria principal y cómo debe circular el transporte público.
José Manuel Calvo ha detallado hoy en la comisión que la Gran Vía se incluirá en el área de prioridad residencial (APR) del distrito centro y que en ella se mejorará el arbolado y se aumentarán los pasos peatonales, además de anunciar que "en paralelo" se va a lanzar un concurso para "mejorar todas las plazas del entorno de Gran Vía".
"Queremos hacer una Gran Vía a la altura del siglo XXI", ha dicho el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS), para lo que se reservarán 5 millones de euros para el proyecto global, de los que este año se presupuestarán 800.000.
Por parte del PP, el concejal José Luis Martínez-Almeida ha destacado la "cuestión ideológica" que se esconde tras la remodelación de la Gran Vía y ha pedido al equipo de Gobierno municipal que si quiere restringir el uso del vehículo privado busque y ofrezcan una "alternativa" para todas las personas que circulan a diario por la Gran Vía.