La Biblioteca Nacional, comprometida con las mujeres escritoras
Redacción
La Biblioteca Nacional se prepara para celebrar este 24 de octubre el Día de las Bibliotecas, una jornada para disfrutar de estos templos del conocimiento, que cobra especial relevancia en la sede principal de la edición en lengua española.
Para su directora, Ana Santos Aramburo, gestionar la Biblioteca Nacional es “un reto continuo, siendo consciente de lo que significa para la cultura española, desde que se creó en 1711”.
En la Biblioteca Nacional se conserva la colección de mayor valor patrimonial en lengua española. “Es el contenido de la cultura española”, continúa diciendo la directora. Un contenido que se incrementa cada año con unos 500.000 ejemplares, editados en cualquier soporte.
A las nuevas aportaciones físicas, hay que añadir todos los contenidos digitales de las webs españolas. “Aproximadamente la Biblioteca contiene 35 millones de ejemplares y muchos terabytes de información digital”, explica Ana Santos.
Este año, la Biblioteca Nacional quiere rendir homenaje a Gloria Steinem, Premio Princesa de Asturias 2021 de la Comunicación. “Es una feminista que rompió barreras cuando todavía no se hablaba de esto. Ahora recogemos los resultados de estas pioneras luchadoras”, asegura Santos.
La directora destaca de Steinem su libro ‘La revolución desde dentro’, para poner en valor la autoestima, “algo que nos falta a muchas mujeres”, como primer paso para el empoderamiento: “Las mujeres debemos creer en nosotras mismas para poder salir de la infelicidad”, dice Santos.
La Biblioteca Nacional participa en las ‘Editatonas’ de Wikipedia, una iniciativa que pretende visibilizar a las mujeres en los diversos ámbitos. En la última ocasión, le tocaba el turno a las mujeres escritoras.
“Wikipedia es una fuente de información fundamental y somos conscientes de que faltan muchos contenidos relacionados con mujeres. Por eso llevamos años organizando estos eventos con el objetivo de incrementarlos, para que niñas y jóvenes sean conscientes de que hay referentes”, explica.
Pedimos a Ana Santos que escoja alguna joya de la Biblioteca Nacional y se decanta por el ‘Cantar de mío Cid’, como muestra de los muchos tesoros que alberga, sin los cuales se habría perdido para siempre ese texto.
Son ejemplares únicos protegidos con una seguridad especial. “La última vez que desapareció un libro fue en 2007 y se reforzaron las medidas de seguridad. Los ejemplares más valiosos se consultan en salas especiales, con una cámara que vigila continuamente”, explica la directora.
Afortunadamente, el contenido de la Biblioteca está digitalizando, lo que facilita la conservación de los originales. “Los investigadores en la sala cada vez son menos. En los últimos 5 años nos han visitado unos 600.000 usuarios, mientras que las consultas digitales llegaron a los 12 millones”.