Hace 31 años, la OMS eliminó la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales. Hoy celebramos el Día Internacional contra las Transfobia, Homofobia y Bifobia, y lo hacemos con la certeza de que aún queda camino por recorrer frente a la discriminación y la violencia contra el colectivo.
El rechazo y la discriminación por orientación sexual o por identidad de género está penado en España. Tenemos leyes que protegen a estas personas frente a las agresiones e insultos, pero la realidad nos dice que las personas homosexuales, bisexuales y transexuales, lo siguen sufriendo.
De hecho, según el Observatorio Madrileño de LGTBfobia, en nuestra Comunidad se denuncia solo un caso de cada tres. El pasado año se produjeron en Madrid 211 agresiones homófobas.
Sin embargo, el miedo a contarlo y denunciar estos actos violentos se va perdiendo, según nos cuenta el inspector José María Benito portavoz general de UFP: “Actualmente, con la tipificación como delito de odio, se producen más denuncias”, asegura.
“Antes las personas agredidas tenían miedo de denunciar. Ahora, cada vez más gente ha tomado conciencia de que pueden denunciar porque se sienten más protegidos”, dice el inspector.