En la Semana de la Movilidad, un equipo de Madrid Directo ha querido descubrir cómo se limpian los vagones del metro de Madrid. Por fuera, dos estructuras proyectan agua con jabón detergente y, en una segunda fase, se aclara con agua de red y, por dentro, se encargan los operarios de limpieza manualmente.
En el Metro de Madrid existe una compleja red de limpieza encargada a estas tareas. Cada día se realiza una limpieza de todos los trenes que salen a circular, tanto en el interior del recinto de viajeros como en la cabina de conducción. Además, cada 14 días se lleva a cabo una limpieza exterior con los túneles de lavado.
Para la limpieza diaria, alrededor de 250 personas se desplazan por toda la red durante la noche y hacen posible que el interior de cada tren esté impecable todas las mañanas. Para la limpieza exterior, Metro dispone de 11 túneles de lavado, todos ellos dotados de una recicladora de agua para asegurar el mínimo gasto.
El funcionamiento es similar al de un túnel de lavado para coches, donde la máquina tiene un programa diferente y posee unos carros con cepillos que se desplazan longitudinalmente. Para el interior, los operarios se encargan de una auténtica desinfección en profundidad.
Además del mantenimiento de limpieza, también se hace un mantenimiento técnico. "Se hacen las revisiones, las inspecciones, espaciadas en el tiempo y además reparamos cualquier tipo de avería que se pueda producir en el tren en línea", nos cuenta Pedro.
"Pipas, periódicos, los días de fiestas alguna vomitona que otra" es lo peor que se han llegado a encontrar en el interior de los vagones, pero aseguran que, a pesar de ello, el ciudadano de Madrid es una persona cívica y limpia.