Esta mañana, a las 08:00 horas, dos ladrones armados con pistolas esperaban a los trabajadores de la sucursal bancaria ubicada en el número 28 de calle Alcarria de Leganés. Finalmente, con empleados y clientes de rehenes, han logrado huir con un importante botín.
Al parecer, el atraco lo tenían estudiado. A la llegada el segundo empleado a la sucursal, le han encañonado con una pistola en la espalda y, una vez en el interior de la entidad bancaria, han amordazado y maniatado con bridas de plástico a los dos trabajadores, al igual que a los que iban llegando después a su puesto de trabajo.
Cuando ya iban a salir con el botín, el dinero de la caja fuerte y de dos de los cajeros que tiene acceso el cliente desde la calle, también han atracado a un hombre que iba al cajero y, bajo la amenaza "entras o te mato", le han amordazado y maniatado en el interior de la entidad bancaria, junto a los empleados.
Según algunos testigos, dos personas de un furgón también han sido amordazados en el interior de la sucursal. Un individuo que pasaba por la zona ha dado la voz de alarma al ver algo sospechoso en el interior banco.
Los ladrones iban vestidos con gafas de sol, mascarilla y ropa oscura. Una vez con el botín, un total de 300.000 euros, han huido en un Dacia Sandero que abandonaban momentos después en la Plaza de la Azucena.
La policía se ha encontrado el vehículo completamente lleno del polvo de un extintor para evitar que pudiesen detectar huellas. Por el momento, no hay detenidos y se sospecha que hayan sido más atracadores.
A pesar de la gran cantidad de rehenes, no ha habido que lamentar heridos. Tras lo ocurrido, la sucursal bancaria ha permanecido cerrada y, en estos momentos, están atendiendo a los clientes en otro banco cercano.