A lomos de dos Harley Screamin Eagle, y con la compañía de Víctor Romero, partimos de la capital para desviarnos en el km. 23 de la A1 hacia la M-106, la carretera de Algete. Allí disfrutamos del retablo de su iglesia y hacemos parada en el Asador. Tomamos la irregular M-123 y llegamos a Valdeolmos Alalpardo, conocido por su árula romana, y allí podemos reponer fuerzas con los guisos caseros de La Marina. Continuamos la marcha hacia Ribatejada, rodeada de un valioso medio natural. Fresno de Torote y Daganzo nos esperan en el final de nuestro recorrido. Llanuras de cereales, pinares y arroyos nos escoltan por el camino. Y, para rematar, nada mejor que conocer lo que vamos a comer. Por eso visitamos la granja donde se crían los bueyes de los que se sirve el restaurante Tonatiuh.