El PSV Eindhoven es uno de los tres equipos más importantes de los Países Bajos y fue fundado por la compañía Philips en 1913 para facilitar un sitio para hacer deporte a sus trabajadores.
Accedemos al estadio de este equipo, en el interior del complejo de la compañía Philips, y nada más entrar nos encontramos con un museo de PSV donde se muestran las sus distintas equipaciones.
Ya en la zona de vestuarios, nos llama la atención que está distribuida en círculo para que los jugadores esté en contacto entre sí todo el tiempo.
Los miembros del equipo también tienen una sala para rezar antes de los encuentros, para los jugadores que así lo requieran, y otro espacio donde poder dar unos toques antes de salir al campo o calentar en bicicletas estáticas.
Y nos hacemos una idea de la emoción que tienen que sentir los futbolistas antes de pisar la hierva accediendo al campo por una de estas grandes puertas.
Precisamente sobre este césped vemos unas grandes antorchas de luz que proporcionan el calor que la hierba necesita para crecer y que luzca con ese bonito color verde, ya que aquí las temperatura no ayudan.
Una curiosidad, el PSV tiene un programa para aquellos alumnos que no son muy buenos en matemáticas o en geografía y acuden al campo a practicar estas materias de una forma más entretenida.