La hostelería ha encontrado en el reparto a domicilio de comida una manera de sortear la crisis. Los bares y restaurantes recurren a todo tipo de envases y transporte para que sus productos lleguen calientes y con garantías sanitarias.
Los dueños de establecimientos reconocen que no les ha quedado otra que incluir la entrega de menús y por ello están ampliando sus cartas y su reserva de recipientes. Algunos hablan de entre 20 o 30 entregas diarias.
En las grandes superficies especializadas y mayoristas de hostelería reconocen el aumento de la demanda de recipientes por parte de los dueños de establecimientos. Estos productos son, por lo general, de un solo uso y por ello hay cierta preocupación en reducir al máximo su impacto en el medio ambiente. El producto más comprado son las bolsas de papel en las que suelen llegar los platos preparados a los hogares.