El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha acusado al Ayuntamiento de la capital de retirar "con nocturnidad y alevosía" una publicidad de Metro de Madrid de las marquesinas de la Empresa Municipal de Transportes (EMT).
Se trata de una campaña con la imagen del Rey Melchor con el lema 'El secreto para llegar a tiempo es Metro' y que el Consistorio la habría eliminado al no contar con la autorización pertinente, como si la tiene la del centenario del suburbano.
En declaraciones a los medios de comunicación, el presidente regional, Ángel Garrido, ha criticado la "insolidaridad" del Gobierno local, que lo ha retirado "porque no les han gustado, igual por el mensaje de que Metro funciona y llega pronto, o igual por la imagen del rey mago porque a Podemos no le gusta celebrar la Navidad". "Al igual esperaba unos brujos celebrando el solsticio de invierno y seguramente no le ha gustado nuestro rey", ha espetado.
Para Garrido, sea la razón que sea, el Ayuntamiento está haciendo gala de "su amor por las dictaduras, de su amor por la censura y de su amor por eliminar todo aquello que no les gusta". A su parecer, este es el ejemplo de la colaboración que pueden esperar por su parte en materia de transporte.
Al respecto, fuentes de la Consejería de Transportes han indicado a Europa Press que se encuentran "sorprendidos" de que el Consistorio "fije retirar una campaña cuando lo que hace es promocionar y fomentar el uso de Metro en Navidad". "No lo entendemos", han sostenido estas mismas fuentes.
Se trata de las marquesinas de la Plaza de Colón, Jacinto Benavente, Cibeles, Sol, Isabel II, calles Narváez, Odonell y Princesa, en el paseo de la Castellana y avenida de Concha Espina.
La respuesta municipal
Sobre esta cuestión, la delegada municipal de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, ha contestado que no contaba con la información pero sí ha asegurado que no seguirá "la estrategia de la Comunidad de crear conflicto en Metro para descargar la atención sobre la falta de flota y capacidad para resolver el funcionamiento" del suburbano.
Se trata del penúltimo enfrentamiento entre Comunidad y Ayuntamiento de la capital que tiene sus precedentes en la aplicación de Madrid Central y los protocolos anticontaminación.