Durante una temporada, de octubre a marzo, una mujer de Zaragoza renovó su vestuario sin pagar un euro. "A coste cero", dice la sentencia que la condena a seis meses de cárcel por un delito de estafa continuada. Se dedicaba a cambiar las etiquetas. Las quitaba de la ropa nueva y las cosía en ropa usada que luego devolvía.
La estafa de las etiquetas
Comprar, usar y devolver. Se hace y de forma habitual.
La mujer condenada en Zaragoza reemplazaba de forma meticulosa las etiquetas. Pero hay estafadores que para evitar problemas, ni siquiera las quitan. Y cuando las dependientes descubren el engaño es demasiado tarde.
Las pérdidas por robos, hurtos o estafas en la Comunidad de Madrid rondan los 600 millones de euros al año.
Un método muy hábil
La firma Zara denunció a esta zaragozana por estafa al descubrir su habilidoso método para manipular de forma sistemática las etiquetas y renovar su vestuario a coste cero. Ahora, la jueza le prohíbe también acceder a los establecimientos de la cadena en la capital aragonesa.
Las tiendas suelen dar el plazo de un mes para devolver aquellas prendas que una vez compradas no terminan de convencer, pero con la condición de no haberlas usado previamente. Sin embargo, Zara descubrió que esta zaragozana se había aprovechando de esta circunstancia para desarrollar un fraudulento sistema de intercambio de etiquetas que le permitía renovar cada temporada su vestuario a coste cero.
Compraba prendas nuevas y usando después sus etiquetas –internas y externas– para colocárselas a otras ya había utilizado y que devolvía en las tiendas de la firma
La acusada, Tania M. A., de 31 años, natural de León pero afincada en Zaragoza, fue juzgada el pasado 30 de septiembre por un delito de estafa continuada, ya que estuvo seis meses ejecutando el mismo fraude.