El abuelo que mató a sus dos nietos antes de suicidarse en la localidad granadina de Huétor Tájar ya había tenido fuertes discusiones con su yerno por los niños anteriormente.
Estaba sumido en una depresión y recibía atención en los servicios de salud mental. Un día después del suceso que ha conmocionado a todo el país, se siguen buscando respuestas a esta tragedia familiar.
Las dudas respecto a lo qué pudo suceder aún están en el aire. Los negociadores de la Guardia Civil actuaron con Pepe, el abuelo que se atrincheró con sus nietos, según marca el protocolo. Pero hay quien se cuestiona por qué no entraron en la vivienda cuando se perdió el diálogo.
Vecinos y amigos, insisten en que el accidente de tráfico en el que murieron la abuela y la madre de los niños hace dos meses, ha sido el desencadenante de la tragedia. Era Pepe quien conducía y desde entonces la relación con su yerno era muy complicada.
Le habían retirado el carné, pero aún así conducía; a veces, con sus nietos; motivo por el que el padre, al parecer, no quería que estuvieran con él.
Esperando a que acaben las autopsias, Huétor Tájar se prepara este martes para recibir los féretros de los menores y darles el último adiós.