Evitar accidentes de tráfico y prevenir incendios son los objetivos del plan de desbroce de las carreteras madrileñas. Hay más de 3.000 kilómetros sobre los que se está trabajando retirando la vegetación que crece en los márgenes.
Hoy ha visitado estos trabajos en Villaviciosa de Odón el consejero madrileño de transportes e infraestructuras, David Pérez.
Este plan de actuaciones comenzó en mayo con el objetivo de mantener las vías de circulación en un estado óptimo de visibilidad y seguridad. Ya se ha ejecutado más del 77% de las actuaciones previstas, que se prolongarán hasta finales de otoño.
Riesgo de incendio muy alto
Este año el riesgo de incendio es muy alto, por lo que mantener los márgenes de las carreteras en estado óptimo de desbroce es muy importante, sobre todo en los días de altas temperaturas.
Los desbroces se realizan con tractores provistos de brazos desbrozadores articulados en un ancho de 2-3 metros, en función del tipo de carretera y según las necesidades. Se complementan mediante el repaso manual con desbrozadoras de hilo, en las zonas de señales y debajo de los guardarraíles.