La Organización Mundial de la Salud (OMS), advierte que el 80% de las muertes por infarto se podrían evitar desde la prevención en la obesidad. En la obesidad, intervienen factores biológicos, sociales o psicológicos, de ahí que su tratamiento requiera un abordaje multidisciplinar.
Además, España se sitúa como el país más sedentario de Europa y donde, es necesario el reconocimiento de la obesidad como enfermedad crónica. Por este motivo, se reclaman unidades especializadas en este ámbito o, un Plan Nacional Integral para abordar una enfermedad estigmatizada.