El 'Saltamontes' de Vigo en el que perdió la vida un hombre el pasado sábado en las fiestas de Matamá carecía de la autorización municipal al no haber presentado toda la documentación que le fue requerida, según ha informado este lunes el Ayuntamiento en un comunicado.
El Gobierno municipal explica que le trasladó al titular de la atracción varios requerimientos con la documentación que tenía sin aportar y también envió a la comisión de fiestas de Matamá la resolución donde se indicaba que los documentos presentados resultaban "incompletos para el ejercicio de actividad" por lo que se declaró la "comunicación no conforme”.
El Ayuntamiento asegura que tanto el titular de la atracción como la Comisión de Fiestas tuvieron notificación escrita de la falta de autorización por no atender esos requerimientos.
El Gobierno local recuerda que la ocupación temporal de la vía pública para la celebración del evento está sujeta al control y autorización previas del Ayuntamiento.
En estos casos, la administración local registra cada una de las atracciones generando un expediente particular para cada una de ellas.
En este expediente, el titular debe aportar el proyecto técnico de la atracción, manual de funcionamiento y libro de operaciones.
Por su parte, la Comisión de Fiestas presenta una declaración responsable, firmada por el titular de la atracción, donde se designa a un técnico-ingeniero que certifica la instalación.
La autorización de ocupación de vía pública se concede una vez que la documentación esté correcta y la declaración responsable entregada, algo que, en este caso, según manifiesta el Ayuntamiento, no se daba. El juzgado de instrucción número 3 de Vigo mantiene abiertas las diligencias para investigar la muerte que se produjo en la atracción de feria.
El suceso se registró a las 2 horas del sábado en la calle Manuel Cominges, en las fiestas de la parroquia de San Pedro de Matamá, desde donde varios particulares alertaron de que se había desprendido una parte de una atracción.
Allí quedó la víctima, un hombre de 35 años, atrapada y cuando llegaron los equipos médicos solo pudieron confirmar su fallecimiento.
Los bomberos de Vigo tuvieron que hacer uso del material de excarcelación para poder liberar el cuerpo.