Uno de los cementerios más visitados por miles de madrileños hoy es el de La Almudena. Es la necrópolis más grande de la ciudad y de toda Europa Occidental.
Son 120 hectáreas en las que descansan unos 5 millones de difuntos. Como curiosidad, alberga 300 creaciones funerarias protegidas por el Estado. Durante todo el día, el camposanto está recibiendo un goteo incesante de familiares que acuden a recordar a sus seres queridos.
Un día en el que la emoción se apodera de los visitantes y las flores llenan las tumbas y los nichos. Las familias aprovechan este día festivo para, pese al dolor, acercarse a ver a aquellos que ya no están.