Emanciparse es casi misión imposible para los jóvenes hoy en día en España. La tasa cae hasta el 19%, el nivel más bajo desde el año 2002.
Hasta 8 de cada 10 jóvenes entre 16 y 29 años vive en casa de sus padres, y las razones son el paro, la precariedad, los bajos salarios y, sobre todo, el elevado coste del alquiler.
Un menor de 30 años tiene que dedicar el 90% del sueldo a pagar el alquiler de una vivienda y en Madrid capital es peor aún: deberían invertir el 110%.
Lo que más preocupa, el poder mantener una vivienda teniendo una familia a tu cargo.