La masa de aire polar que ha adelantado el frío de diciembre desde este miércoles en amplias zonas de España se prolongará hasta el domingo, cuando casi medio país se congelará de madrugada. Las temperaturas ascenderán el lunes tanto de día como de noche tras cinco días de tiempo casi invernal.
La predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) señala que más de una docena de capitales de provincia podrían congelarse esta semana, con temperaturas mínimas que llegarían el domingo a -3ºC en Teruel; -1ºC en Albacete, Ávila, Cuenca, Lleida, Segovia y Zamora, y 0ºC en León y Toledo. Ese día será el más gélido del episodio, con heladas de madrugada en media España y casi medio país con 5 a 10 grados menos de lo normal de día.
La explicación a este anticipo casi invernal se debe a la entrada de “una masa de aire polar” por un “pasillo” generado entre un anticiclón atlántico y un área de bajas presiones ubicada en Europa occidental, según Rubén del Campo, portavoz de la Aemet.
“A pesar del nombre, la masa de aire polar no significa que venga desde el polo. Su nombre se otorga a masas de aire procedentes de latitudes muy altas. Por ejemplo, el origen de la actual puede estar en el entorno del sur de Groenlandia. A las masas de aire que llegan desde mucho más al norte, desde regiones muy próximas al polo, se les denomina masas de aire ártica”, explicó Del Campo.
Este fin de semana continuarán los cielos nubosos en el extremo norte peninsular, aunque las precipitaciones serán más débiles y las nevadas irán remitiendo. En el resto del país brillará el sol o aparecerá algún intervalo nuboso, pero no lloverá excepto en zonas del área mediterránea.
El ambiente frío persistirá hasta el domingo con temperaturas entre 5 y 10 grados por debajo de lo normal en amplias zonas del interior peninsular. “Habrá heladas en áreas no sólo de montaña, sino también de la meseta y en páramos. De hecho, este fin de sema podría incluso bajarse de cinco grados bajo cero en estas zonas de páramos, especialmente en el noreste de Castilla-La Mancha y en puntos de la provincia de Teruel”, apostilló Del Campo.
Las temperaturas máximas estarán por debajo de los 15 grados en la mayor parte del interior peninsular y se situarán entre 10 y 12 grados en amplias zonas de la mitad norte.
A partir del lunes, los termómetros iniciarán un ascenso y las temperaturas tenderán a normalizarse con valores más propios de la primera quincena de noviembre.
Lluvia en el Mediterráneo
Por otro lado, Del Campo apuntó que una vaguada (es decir, un área de bajas presiones cuyo aire frío y la circulación de vientos que se genera en su entorno aumenta la inestabilidad atmosférica) se extenderá en niveles medios y altos de la troposfera sobre el este peninsular y el entorno del Mediterráneo occidental.
Sus efectos se notarán sobre todo en Baleares, donde al menos hasta el domingo hay posibles chubascos localmente fuertes, que podrían trasladarse a zonas costeras de Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía oriental, así como en Melilla.
Del Campo recalcó que en Baleares se espera “un temporal marítimo importante”, con olas que este domingo podrían alcanzar los siete metros de altura.
“Es posible que, ya de cara al domingo o comienzos de la próxima semana, a partir de la vaguada se formen una DANA (depresión aislada en niveles altos) y una borrasca en superficie en el Mediterráneo occidental, cuyos efectos se notarían sobre todo en Baleares y el extremo oriental de la península, de nuevo con chubascos que podrían ser localmente fuertes sobre todo en el archipiélago balear”, indicó Del Campo.
En cuanto al resto del país, la próxima semana no se esperan precipitaciones significativas, si acaso alguna lluvia débil en el Cantábrico.