La aprobación de la reforma laboral por la mínima pone en entredicho la estrategia seguida por el Gobierno. Los socios de investidura advierten al Gobierno que tendrá que esforzarse ahora más para lograr sus apoyos de nuevo. Y desde dentro del ejecutivo, Unidas Podemos recela de la geometría variable, ante un PSOE que hizo uso de ella tras ver que Yolanda Díaz no lograba recabar los apoyos habituales.
Imagen de unidad tras estar en riesgo la reforma laboral y la propia coalición de Gobierno.
Desde las fuentes oficiales se asegura que lo de ayer fue un triunfo del Gobierno pero no son pocos los que consideran que la apuesta y el proyecto de Yolanda Diaz queda en entredicho.
El coportavoz de la Ejecutiva de Podemos Pablo Fernández concedió este viernes que, tras la aprobación de la reforma laboral con el voto en contra de ERC, PNV y EH Bildu, ahora “toca reconstruir, rehacer la mayoría del bloque de investidura”.
La vicepresidenta Nadia Calviño indicó que “a lo largo de estos tres años y medio que hemos estado gobernando hemos ido sacando adelante todos los proyectos” con “una geometría variable”, puesto que “unos proyectos han sido apoyados por un grupo de partidos y otros por otro grupo de partidos”. “Es la política en estos parlamentos fragmentados característicos de este momento en Europa”.
Por su parte, el exvicepresidente Pablo Iglesias ha ahondado en esa línea, dado que la votación revela que la fórmula de la geometría variable es "una trampa". "De no ser por el error (en referencia al voto emitido por un diputado del PP a favor), hoy la derecha podría haber asestado un golpe durísimo a Yolanda y a UP. Toca rehacer y cuidar el bloque plurinacional", ha desgranado en Twitter.