El paso de ‘Hortensia’ por Madrid ha tenido efectos devastadores. La nueva borrasca que ha barrido la península y que ha mantenido en alerta naranja a Madrid capital y la sierra ha traído rachas de viento que han provocado importantes destrozos.
Destrozos que también han afectado -otra vez- al arbolado de Madrid: Pinos arrancados de cuajo, ramas caídas, cuando todavía no nos habíamos recuperado de Filomena.
Es uno de los peores destrozos que ha ocasionado el viento. El vendaval ha arrancado por completo dos faldones de un tejado en un edificio de viviendas de Villa de Vallecas. Uno ha ido a parar a una cubierta contigua. Y el otro ha caído sobre un árbol y varios vehículos.
Ayundándose de una gran escala y una grúa, los bomberos tardarán horas en retirar los faldones. Y es que los bomberos no han parado. 158 intervenciones en la Comunidad y 58 solo en Madrid capital.
En Cibeles, el viento ha arrancado de raíz un gran pino del cuartel general del Ejército. El carril lateral del Paseo del Prado ha tenido que ser cortado. Y en Moncloa Aravaca otro gran ejemplar ha sido abatido por el viento.
Árboles caídos en Aranjuez y en Leganés donde el viento se ha cebado con otro árbol mientras que en Alalpardo ha arrancado la marquesina y la valla del campo de futbol. Y no solo ha sido el viento, en Móstoles, el problema ha sido el agua. No salimos de una y ya estamos en otra.