La batalla en Venezuela gira ahora entorno a la ayuda humanitaria.
El presidente del país, Nicolás Maduro, reitera que impedirá la entrada de cualquier convoy mientras que muchos venezolanos se acercan a la frontera con el objetivo de conseguir esa ayuda lo antes posible.
En Cúcuta, principal paso fronterizo de Colombia con Venezuela, todo es incertidumbre ante la llegada de la ayuda humanitaria internacional para el país petrolero.
Las tres pistas del puente binacional de Tienditas, por donde se espera que pase la ayuda humanitaria, permanecen bloqueadas por el régimen de Nicolás Maduro, que puso en la mitad la cisterna naranja de un camión y dos contenedores azules, así como unas mallas metálicas que impiden el paso hacia el lado venezolano de la frontera.
Ante esta situación, Juan Guaidó, autoproclamado presidente del país, ordenó a las Fuerzas Armadas que permitan el ingreso de la ayuda humanitaria, que además de Cúcuta será enviada por la frontera con Brasil y desde una isla caribeña.
A estas declaraciones se sumó la del secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, quien aseguró en Twitter que la gente de Venezuela "necesita desesperadamente ayuda humanitaria".