Verano, calor y obras. Los trabajadores de la construcción son de los más vulnerables en jornadas de fuerte insolación. Estar en la calle, en plena canícula y realizando un intenso trabajo físico les hace los más propensos a padecer golpes de calor.
La Comunidad de Madrid ha iniciado una campaña para informar a las empresas del sector de las medidas existentes para evitar accidentes laborales.
Con cerca de 40 grados y haciendo un gran esfuerzo físico se recomienda parar cada dos horas e ir a un sitio con aire acondicionado, por ejemplo alguna de las casetas instaladas en el tajo.
Otras recomendaciones, contar con zonas ventiladas y puntos de hidratación. Y en general, estar pendiente los unos de los otros. Especial atención a los trabajadores que vuelven de vacaciones o de una baja, adaptándose poco a poco. También a los que padecen patologías cardiacas y obesidad.
Ante la sensación de mareo, vómitos o calambres musculares llamar los servicios de emergencia.
Madrid ha informado a más de 650 empresas. En lo que llevamos de verano ha fallecido un trabajador por golpe de calor. Sucedió el 5 de julio en Paracuellos de Jarama