La OCU ha cuantificado el sobrecoste que supone a las familias el alza del precio de los alimentos.
Calcula que los españoles ya pagamos 860 euros más al año por llenar la cesta de la compra y por llenarla de productos básicos.
De este modo, la leche entera cuesta un 33% más que hace un año, el aceite de oliva ha subido un 30% y, por ejemplo, los huevos un 27% más.
Unos precios difícilmente asumibles por muchos hogares y que viene obligando a los consumidores a cambiar sus hábitos de consumo.
Además de optar más por marcas blancas, hay quien adquiere ahora más congelados en vez de comprar verdura y pescado fresco. También hay quien prefiere comprar el embutido envasado en lonchas en vez de al corte.